Buenos conciertos los de ayer de Tulsa y Hola a Todo el Mundo. No conocía la Sala Rock Kitchen y me gustó. Un poco a desmano, pero el sonido y el tamaño que es lo importante, muy solventes. Comenzó Tulsa como telonera pero no lo pareció, por calidad y extensión de su actuación. Rock oscuro que con una magnífica formación como la que le acompañó el sábado, gana enteros. Emocionante durante toda la actuación, momentos como los de “Matxitxako” o “Algo Ha Cambiado Para Siempre”, son difíciles de olvidar.
Hola a Todo el Mundo fueron lo contrario, muy luminosos con sus capas, flores, lámparas y demás parafernalia. Había quien decía que parecían elfos. Bromas aparte ofrecieron un concierto muy sólido que destacó por su intensidad, lograda desde una base de guitarras que se complementa (y a veces satura), con un violín eléctrico y un acordeón. Mejor cuando suenan más breves y pop y un poco excesivos cuando se lanzan sin contemplaciones ni tempo adecuado al folk. Increíbles los crescendos que se marcan a base de coros y épica, a unos canadienses por algo parecido les consideran el mejor grupo del mundo.
En cualquier caso, un grupo a tener cada vez más en cuenta. Para el final, Tulsa y HATEM juntos cantando el hit de los madrileños “A movement between These Two”.
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Escrito por Iñaki Espejo-Saavedra el 29 January, 2011
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